En la costa de Cabo de Palos, esta cala es un clásico de las inmersiones locales en días de viento de levante, protegida de olas y corrientes, y con un fondo muy divertido y variado, de múltiples formaciones rocosas entre praderas de Posidonia Oceanica en un estado de conservación envidiable. Con la ayuda de un compás, hay múltiples recorridos a realizar.

En la costa de Cabo de Palos, esta cala es un clásico de las inmersiones locales en días de viento de levante, protegida de olas y corrientes, y con un fondo muy divertido y variado, de múltiples formaciones rocosas entre praderas de Posidonia Oceanica en un estado de conservación envidiable. Con la ayuda de un compás, hay múltiples recorridos a realizar.

Este famoso pecio que reposa en posición de navegación frente a la bocana del puerto de Cabo de Palos, yace en descanso eterno desde un fatídico 12 de abril de 1946 cuando un corrimiento de carga durante un temporal lo hizo zozobrar cobrándose la vida de una pasajero. Su eslora de 51,5m y manga total de 8m, le confiere la facilidad de ser buceado en su totalidad en el tiempo que nos permite el consumo de la botella, puesto que es un perfil avanzado por su constante profundidad media de -36m (mínima 27m, máxima 42m).

Es un carguero mercante que que transportaba carbón para el ejército francés  durante la primera guerra mundial. El buque, bautizado en su botadura como SS Thordisa, intenta ayudar al SS Doris, que estaba siendo atacado por el U-68. Éste día, el comandante alemán, se cobró 2 víctimas en un solo ataque, mandando a pique con un torpedo que partió el pecio en dos. La proa reposa en -42m y la hélice está en un fondo de -46m.

Es un carguero mercante de gran tonelaje que que transportaba carbón para el ejército italiano durante la primera guerra mundial. La versión del capitán es que se hundió atacado por un U-boot alemán en dura batalla, tras el impacto de un torpedo. Pero el 25 de junio de 1915, ningún submarino operaba en la zona, siendo más probable que el miedo a ser descubiertos por los lobos de mar y en navegación nocturna chocara contra el Bajo de Fuera u otro buque del convoy, tal y como demuestra su proa deshecha y el morse de sala de máquinas en posición Atrás Toda!! Es un pecio idóneo para buceo técnico con la cubierta en -45m y la hélice en -60m.

Es un carguero mercante español que transportaba fertilizantes, fue el primer buque perdido por la recién inaugurada Transmediterránea el 1 de octubre de 1918, cuando el submarino UB49 del comandante Erhensberber rompió fuego contra este mercante sin previo aviso, obligando los 26 tripulantes a saltar a los botes salvavidas.

Reposa en un fondo de arena en -48m y toda la sobre estructura ha desaparecida mostrando la enorme caldera y el motor.

Este bajo que representa la continuación de la costa y el Faro de Cabo de Palos, desciende suavemente en la cara norte en una extensa pradera de Posidonia Oceanica, ofreciendo en la cara sur un bonito recorrido de bloques, cuevas y surcos labrados como si de un río imaginario se tratara, y que en tiempos remotos robó a barcos antiguos sus anclas. Encuéntralas

Altiva roca que es la continuación de los bajos de Piles con un perfil curioso que desciende bruscamente a 23m, ofreciendo un espectáculo de benthos y coralígeno impresionante dentro de la reserva Marina. Por regulación administrativa, éste bajo solo se puede bucear los fines de semana.

Son 2 bajos conectados por diferentes barras rocosas que se elevan desde una profundidad máxima de 27m hasta los 12m de su parte superior, y que con forma alargada proponen una divertida inmersión protegidos por la corriente. Su enorme población de grandes meros es espectacular, y se adereza con muchas otras especies pelágicas propias de la más conocida reserva Marina.

Son 2 bajos conectados por diferentes barras rocosas que se elevan desde una profundidad máxima de 27m hasta los 12m de su parte superior, y que con forma alargada proponen una divertida inmersión protegidos por la corriente. Su enorme población de grandes meros es espectacular, y se adereza con muchas otras especies pelágicas propias de la más conocida reserva Marina.

Inmersión espectacular que ofrece dos alternativas para diferentes niveles de experiencia, donde la parte profunda del bajo de las agujas impactan por el contraste de luces y la concentración de vida salvaje, y las zonas más someras inundadas de luz con el gran abanico de gorgonias blancas y púrpuras nos guían hacia la gruta que atraviesa la montaña sumergida.

Probablemente la mejor inmersión del mediterráneo, combina a la perfección la exuberante vida marina protegida de la Reserva de Islas Hormigas y los restos de pecios contemporáneos del sXIX y principios del XX,  esparcidos por las laderas del bajo, desde profundidades de -54m a una cómoda descompresión en la cima del bajo en -6m.